DEPRESIÓN ¿PROBLEMA DE VOLUNTAD?
El siguiente artículo pretenderá responder a esta pregunta de forma satisfactoria. Para dicho fin nos parece interesante repasar de qué hablamos cuando nos referimos a la depresión.
La depresión es un trastorno del estado del ánimo que genera en la persona la sensación subjetiva de estar bajo de energía, imposibilitado de disfrutar de las cosas cotidianas, con diversos pensamientos pesimistas orientados hacia uno mismo, hacia el futuro y hacia el mundo.
Este trastorno tiene diversa sintomatología tanto física como cognitiva, pudiendo destacarse la pérdida o aumento de peso, insomnio o hipersomnia, agitación o enlentecimiento motor, fatiga, sentimientos de inutilidad o culpa, falta de concentración y memoria, así como pensamientos de muerte. Hay que mencionar que para hablar de un episodio depresivo deben existir esta sintomatología por un periodo de 2 semanas.
Las últimas cifras de la organización mundial de la salud nos dicen que 350 millones de personas sufren depresión en el mundo, mientras que cerca del 20% tuvieron, tienen o tendrán depresión en algún momento de sus vidas. Por otra parte, diversas investigaciones hoy presentan a la depresión como un fenómeno biopsicosocial, donde estas tres dimensiones se encuentran implicadas en dicha problemática.
Podríamos extendernos mucho más sobre un trastorno tan estudiado, pero nos parece interesante plantear algo referido a nuestro artículo. Existen socialmente diversos mitos en torno a este trastorno, muchas veces en nuestra vida cotidiana se escuchan frases tales como "este está mal porque quiere", "si sigue en esa cama nunca va a estar bien", "este en realidad es un vago", "yo creo que la depresión se la crea uno mismo". Luego de haber mencionado la complejidad de dicha problemática claramente podemos afirmar que de estas frases cotidianas no podemos rescatar ninguna, ya que simplemente no evidencian que la persona que las repite conozca sobre la complejidad multifactorial de un trastorno tan complejo como la depresión, por lo que nos pareció interesante escribir este artículo para concientizar a familiares o conocidos de personas que estén atravesando un periodo depresivo.
A modo de cierre es importante hacer una salvedad, la voluntad es un factor positivo en el tratamiento debido a que la persona puede acudir a un profesional idóneo, ya sea un psicólogo o psiquiatra según el caso particular, pero no es la raíz del problema ni su solución, ya que la depresión es por definición un trastorno que afecta la voluntad.