TERAPIA COGNITIVA

La Psicología Cognitiva es una escuela teórica que nace en la decada del sesenta de la mano de Aaron Beck. Dicho autor, siendo en ese momento psicoanalista, no encontraba resultados satisfactorios en su trabajo con pacientes en el consultorio desde la escuela Freudiana, por lo que crea este enfoque terapéutico para tratar de obtener mejores resultados en sus tratamientos.

En resumidas cuentas, la Psicología Cognitiva postula que las personas no sufren necesariamente por los hechos que le acontecen en su vida cotidiana, sino más bien por la interpretación que de estos hechos hacen. En este sentido, siempre delante de una emoción va a existir un pensamiento, una forma de interpretar un fenómeno. Para graficar este concepto sería interesante mencionar uno de los esquemas básicos de dicha terapia.  

En el esquema presentado con anterioridad, podemos ver como las situaciones son interpretadas por pensamientos que generan emociones y conductas particulares.
Para analizar esto con un ejemplo, si ante un examen (situación) yo me digo a mi mismo "si no apruebo soy un fracaso" (pensamiento), lo más probable es que esta manera de interpretar la situación me genere una intensa ansiedad (emoción) y que falte al examen y me quede en mi casa (conducta).

En este caso antes citado, el objetivo de la terapia cognitiva no es precisamente cambiar los pensamientos negativos por otros positivos, sino más bien generar un proceso por el cual la persona pueda tener otra perspectiva de las diversas situaciones sin caer en pensamientos tan extremos y catastróficos, y de esta manera reducir la intensidad emocional.

Esto es un ejemplo de como la terapia cognitiva pretende producir un proceso por el cual  la persona pueda convertirse en su propio psicólogo y así poder manejar los diversos pensamientos que le generan síntomas negativos en su vida cotidiana.

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